Tras cinco años de dedicación, pandemia mediante, el investigador del grupo Lípidos bioactivos y lipidómica culmina su tesis doctoral
El mundo de la investigación es un viaje apasionante, lleno de desafíos, en el que la paciencia y determinación son claves. Esta es la receta que ha llevado a Álvaro Garrido a ser nombrado nuevo doctor en el IBGM CSIC-UVa de Valladolid. Con él hemos charlado para conocer más sobre sus inicios, el camino recorrido y sus planes de futuro una vez defendida la tesis doctoral.
Álvaro Garrido, una vez finalizado el acto de defensa de su tesis
Garrido se sumergió en la investigación después de completar el grado en Química, concretamente en la rama orgánica, en la Universidad de Valladolid. Una vez terminado el Máster en Técnicas Avanzadas en Química, especializándose en síntesis orgánica, un encuentro con un doctorando del IBGM que trabajaba en la Facultad de Ciencias por aquel momento – y que le comentó a lo que se dedicaba en el Instituto-, lo llevó a unirse al laboratorio de Jesús Balsinde. En su grupo estaban buscando químicos para análisis de muestras por espectrometría de masas, técnica que Garrido conocía, y que había utilizado con anterioridad. Fue de esta manera como continuó con su pasión por el trabajo en el laboratorio y decidió emprender el desafío del doctorado.
«La oportunidad de incorporarme al IBGM de la mano de Jesús Balsinde fue muy buena para mí. Así es como arranqué con la tesis, investigando el perfil lipídico de diferentes células”
Su línea de investigación
Estos años, el investigador vallisoletano se ha centrado en estudiar perfiles lipídicos mediante espectrometría de masas para comprender y diferenciar cómo afecta a dichos perfiles la presencia o ausencia de una proteína crucial en el metabolismo lipídico, la lipina-2. Si has leído esta explicación y te has quedado igual que estabas, no te preocupes, que eso nos pasa a todos. Entremos en materia tratando dos aspectos que nos van a permitir entenderlo mejor:
- La lipina-2 es una enzima clave en el metabolismo lipídico, que regula la síntesis de diferentes tipos de lípidos.
- Pero… ¿qué son los lípidos? Estas son moléculas esenciales que desempeñan papeles determinantes en el almacenamiento de energía, la estructura celular, la regulación hormonal y otras funciones biológicas.
Al estudiar estos perfiles lipídicos, entonces, se puede comprender cómo la presencia o ausencia de la lipina-2 afecta a la composición y cantidad de diferentes tipos de lípidos en las células.
«Durante este tiempo he realizado análisis lipídicos en células ‘normales’, por decirlo así, y en células que carecen de lipina-2, que como decimos es una enzima vital en el metabolismo lipídico. Utilicé la espectrometría de masas, técnica que permite identificar y caracterizar compuestos químicos y determinar estructuras moleculares, entre otras cosas, para estudiar las diferencias en los perfiles lipídicos», nos comenta.
La relevancia de su investigación reside también en que la lipina-2 controla los niveles de dos lípidos bioactivos muy importantes, como el ácido fosfatídico y el diacilglicerol, que desempeñan un papel trascendental en la señalización celular. Comprender cómo la falta de esta proteína afecta a estos lípidos es esencial para avanzar en la comprensión de diferentes procesos biológicos.
Mirando al futuro
Ahora que ha completado su doctorado con éxito, la máxima calificación de este así lo acredita, Garrido planea proseguir su carrera en esta área. «Me gusta la investigación y, aunque inicialmente quería seguir en química orgánica, las circunstancias actuales me han llevado a continuar haciendo el postdoctorado, centrado principalmente en el análisis de muestras biológicas por espectrometría de masas, algo que ya he realizado durante mi tesis”, señala.
El joven describe el doctorado como “una montaña rusa emocional”. “La importancia de la paciencia y la capacidad de adaptarse a la incertidumbre son las claves para superar los desafíos que surgen en la investigación. También destacaría que, a lo largo de este proceso, aprendes a sobrellevar la frustración cuando los experimentos no salen como esperabas. Ahí es cuando hay que resistir mentalmente”, indica Garrido.
Para aquellos que están considerando emprender el largo viaje que supone realizar la tesis doctoral, el investigador lo tiene muy claro: “Tomadlo con ganas, pero con paciencia. Distribuid ese espíritu a lo largo de los años de la tesis y sed conscientes de que habrá desafíos. Soy muy pesado con la paciencia, pero es que es fundamental, ya que no todo saldrá perfecto desde el inicio”, finaliza.
Autoría de las fotos I IBGM CSIC-UVa de Valladolid