Un año más, nuestro Instituto ha tenido el placer de colaborar en la fase autonómica de la XX Olimpiada de Biología 2025, acogiendo durante una semana a tres de los estudiantes premiados en Castilla y León. En esta edición, los visitantes han sido Juan Casquero Elices, del IES Vía de la Plata (Guijuelo, Salamanca), Samuel San José Santos, del IES Diego de Praves (Valladolid) y Pablo Alaejos Santos, del IES Fray Diego Tadeo González (Ciudad Rodrigo, Salamanca).



Durante su estancia, los alumnos han tenido la oportunidad de adentrarse en el día a día del trabajo científico, recorriendo varios de los laboratorios del IBGM de Valladolid. Han podido conocer de cerca la labor investigadora de grupos como los de Envejecimiento y calcio, Enfermedades inflamatorias y degenerativas, Fisiopatología de las enfermedades degenerativas, Desarrollo y degeneración del sistema nervioso y Metabolismo lipídico e inflamación. Además, visitaron el servicio de histología, esencial para el avance en nuestras líneas de investigación.
La actividad ha estado coordinada por nuestra compañera Marita Hernández, y ha contado con la colaboración de las investigadoras Clara Meana, Mayte Montero, Diego Sánchez, Alicia Vilas y Mabel Cabero, quienes compartieron con los estudiantes su experiencia y conocimientos en distintas áreas de la biomedicina.





Ciencia y reflexión
Más allá del laboratorio, también hubo espacio para el pensamiento crítico y la reflexión. El jueves por la tarde se organizó una sesión de cinefórum en la que se proyectó el documental «Criogenización: vivir dos veces«. A través de un caso real, nos acercamos a las motivaciones y cuestiones que se plantea una familia que ha optado por preservar un cuerpo a muy bajas temperaturas con la esperanza de revivirlo en un futuro, cuando se halle una cura para la patología que padece. La actividad generó un animado debate sobre los límites éticos de esta práctica: ¿Es ético intentar prolongar así la vida? ¿Quién decide cuándo vuelve a “nacer”? ¿Se está aprovechando la empresa de la vulnerabilidad de la familia sin tener evidencia científica? , y también se comentaron los límites tecnológicos y sobre el procedimiento, aprovechando el bagaje de los asistentes: ¿Cómo ha sido congelado? ¿Qué posibilidades de viabilidad tienen esos tejidos en la descongelación? ¿Cuánto tiempo puede ser funcional ese tejido congelado? ¿Qué probabilidades tiene el cerebro de recuperar la conectividad? Fue una experiencia enriquecedora en la que, además de ciencia, hubo diálogo y distintas perspectivas.

Cartel del cinefórum, en el que se proyecto «Criogenización: vivir dos veces».
Desde el IBGM nos enorgullece seguir apoyando este tipo de iniciativas que fomentan vocaciones científicas y acercan la investigación a las nuevas generaciones. Un año más, reafirmamos nuestro compromiso con la enseñanza y la divulgación: «El IBGM con las Olimpiadas de Biología». ¡Gracias a todos los que lo han hecho posible!

Autoría de las fotos I IBGM CSIC-UVa de Valladolid